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| Si los humildes nunca me entienden. |
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| Si los hermanos se cansan, de oír las palabras que oyeron siempre. |
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| Si los que saben no necesitan que les enseñe. |
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| Si el que yo quiero todavía está dentro de tu vientre. |
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| Yo canto para usted. El que atrasa los relojes. El que ya, jamás podrá cambiar. Y no se dio cuenta nunca, que su casa se derrumba. |
